Llegó la hora de la limpieza de primavera. Está aquí la época del año en que acostumbramos a darle una limpieza a profundidad a nuestra casa. Limpiar al detalle cada habitación, cepillar los azulejos de los baños o dejar los refrigeradores como nuevos. Se trata de echar agua y restregar puertas y ventanas para darle la bienvenida a la primavera.
Pero esta limpieza general no es cosa de un día, ni se comienza a lo loco. Debe ser planificada y si la convertimos en un evento familiar es mucho mejor. Por ello, el primer paso debe ser programar el día, escoger el fin de semana adecuado y, en dependencia del tipo de casa, crear una ruta de limpieza. Empezar por la cocina, después los baños, los cuartos, etc.
El siguiente paso es ver si contamos con los instrumentos y productos de limpieza necesarios para, una vez que empecemos, no haya necesidad de interrumpir para “ir a buscar la escalera a casa de Alberto”, o “no está aquí pressure cleaner para limpiar la terraza y las ventanas por fuera”. Tampoco debe pasar por alto las medidas de seguridad en caso de utilizar algún producto químico.
Ahora que tiene todo en cuenta, puede entrarle con ganas a la cocina. Por ejemplo, sacar todos los productos de la nevera, limpiar su interior, lavar las gavetas de las verduras, cambiar el filtro del agua y tirar todo lo caducado. El horno es otro de los elementos que más remoloneamos a la hora de limpiarlo a fondo, pues debemos sacar todas las parrillas, echarle detergente y usar guantes para dejarlo como nuevo. Alrededor de los extractores de humo se acumula mucha grasa, que puede ser inflamable. Hay que desengrasarlos, cambiar los filtros y, de esa manera, evitar posibles incendios.
En las habitaciones hay que lavar las cortinas, el cubrecama, limpiar el ventilador de techo. Pasar la aspiradora a las alfombras, darle la vuelta al colchón, lavar las almohadas. Aprovechar para tirar ropa del armario, o mejor donarla o regalársela a algún amigo. No olvides limpiar bien debajo de la cama y detrás de las mesas de noche.
En el caso de los baños, tenemos que remover todas las marcas de jabón y champú que tengan los azulejos. Lavar la cortina del baño, sacar todos los medicamentos del botiquín y tirar los vencidos. Es el momento de lavar bien las juntas de la bañadera, remover la silicona vieja y poner nueva. Además del aporte estético, evita que la humedad penetre dentro de las paredes y se forme moho.
El objetivo principal de esta limpieza es renovarnos, deshacernos de todo lo que nos sobre, de lo inútil y todo lo que encontremos caducado en las despensas. Llegó la hora de la limpieza de primavera.
Así nuestra casa se encontrará lista, reluciente y, por supuesto, más segura.