No es un milagro, es el seguro de propietario

Martha llegó a su casa después de pasar dos semanas de vacaciones y, al entrar, se encontró con que el agua corría escalera abajo desde el segundo piso. Al subir al baño de su habitación, descubrió que antes de irse había olvidado cerrar una llave de agua de la bañera y esta se había desbordado. ¡Menudo desastre! El suelo de madera de la habitación se echó a perder, el techo de la cocina estaba abombado, y de las paredes y el techo del salón principal emanaba agua que caía sobre un sofá completamente empapado. «¿Ahora qué hacemos?», preguntó horrorizada Martha a su esposo, quien contemplaba la escena enmudecido. Fue Alex, el hijo adolescente del matrimonio, quien sugirió llamar al Seguro: «Puede ser que nos ayude». Efectivamente, al reclamar al Seguro, este envió un tasador y en dos semanas recibieron una compensación que les permitió recuperar y reparar todo lo dañado. ¡Puro milagro! Dijo la mujer agradecida. No fue un milagro, como exclamó Martha. La realidad es que el seguro de propietario estándar cubre los daños repentinos y accidentales en los sistemas de la vivienda, como una fuga de agua repentina de una tubería del aire acondicionado, del calentador, de un refrigerador, o la rotura de una manguera de la lavadora o del lavavajillas. El seguro de propietario también suele compensar la reparación de las paredes o paneles de yeso dañados, el reemplazo del suelo de madera dañado y el sofá mojado por la fuga de agua repentina. Ojo, el seguro de propietario excluye las negligencias, los daños causados por falta de mantenimiento o el desgaste natural de un sistema de la casa, así como las inundaciones provocadas por tormentas y lluvias torrenciales. En resumen, contar con un buen seguro de propietario puede librarlo de problemas como el que enfrentaron Martha y su familia. Si desea un seguro de propietario de vivienda más barato, contacte a Univista Insurance.

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